Yo sé que no soy perfecta, hace mucho descubrí que no soy una princesa. He chocado con paredes y caído en hoyos de los que he aprendido a salir.
Hoy trato día a día de abandonar las zapatillas de cristal, camino firme para no caer y estoy atenta para no chocar. Pero no siempre, me es posible mantenerme equilibrada, los fantasmas de mi pasado me persiguen hasta que me alcanzan y no lo soporto, simplemente dejo que las dudas, temores y problemas me depriman. Me encierro en una burbuja llena de pesimismo que me consumen poco a poco, dejo salir las lagrimas que nadie ve y mis peores miedos cobran vida en mis sueños.
Aveces pienso que la vida odia verme feliz y sonreír, por que cuando siento que empiezo a vivir, me lo arrebata o pone obstáculos que hacen que aleje todo lo bueno y me acerque a lo malo.
Vendo recuerdos y compro deseos al son de mi animo, que por lo general es malo ya que vivo deseando lo imposible y luchando en una batalla conmigo misma, donde solo yo salgo herida y rendida. Jamas victoriosa, jamas con sonrisas.
Hoy he encontrado amor y como siempre la obstinada, vengativa y caprichosa vida me hace temblar en una cuerda floja llamada destino, tratando de hacerme caer para sumergirme en depresión. Depresión que jamas podre superar otra vez, lo sé.
Todo esto es tan predecible, ya lo sé, es un dejavu. Pero no dejare que me arrebate una vez más la felicidad, no dejare que la lluvia me moje y los rayos me caigan, estoy decida a esquivarlos y superarlos. No quiero.
Aunque estoy a centímetros de caer, no lo haré. Hoy voy a luchar para ver el sol.
-Cherry-
No hay comentarios:
Publicar un comentario